EL 47 VOLL-DAMM FESTIVAL INTERNACIONAL DE JAZZ DE BARCELONA CIERRA CON CIFRAS DE RÉCORD

El 47 Voll-Damm Festival Internacional de Jazz de Barcelona, que comenzó el pasado 26 de septiembre con un concierto de Diana Krall que dejó sin entradas el Auditori del Fòrum, cerró la semana antes de Navidad con un segundo concierto de gospel y unas cifras finales que avalan el crecimiento imparable de uno de los festivales de jazz más antiguos de Europa. Con un récord absoluto de espectadores de pago, 35.822, y 90.000 asistentes a las actividades gratuitas, la cifra final de asistencia es de 125.822 espectadores, de largo el festival de jazz con más público en Cataluña. El índice total de ocupación es del 86%.

Además de Diana Krall, otros conciertos con sold out fueron las tres citas del padrino del festival, el gran Chucho Valdés, en Sant Cugat, L´Hospitalet y con el grupo Txarango como invitado especial. Iron & Wine, Buika y Children Of The Light fueron otros conciertos con todas las entradas vendidas. Sin embargo, el festival quiere también destacar el esfuerzo para traer artistas de jazz todavía poco conocidos (como en su momento lo fueron, por ejemplo, Diana Krall y Norah Jones, que debutaron en Barcelona gracias al festival) y por ofrecer sin descanso propuestas artísticas más arriesgadas o muy poco conocidas: proponer conciertos en Barcelona como los de los jóvenes Melissa Aldana, Giovanni Guidi y David Virelles es también una cuestión moral.

El festival ha sido también un foco incansable de estrenos: entre otros, el espectáculo de fin de gira de Txarango, Som Mar; la propuesta original de Chucho Valdés En familia; el Jazz Cities Tour de La Locomotora Negra; la celebración del 10 aniversario de la Sant Andreu Jazz Band; la nueva propuesta, radicalmente contemporánea, de la orquesta residente del festival, la Orquesta Jazz Matosinhos, Sargaço; el estreno absoluto de Cantabile, del Marco Mezquida Trio, y de Tot sembla tan senzill, de Celeste Alías a partir de la poesía de Montserrat Abelló, etc.

Entre las actividades gratuitas, el festival valora muy especialmente la respuesta entusiasta de la jornada inaugural Jazz & Food, que acogió a más de 24.000 personas alrededor del jazz y de una atractiva propuesta gastronómica durante 12 horas. El habitual espectáculo especial de la Font Màgica, ya una tradición del festival, sirvió para acercar todavía a más gente la música que ofrece el festival durante casi tres meses. Otro aspecto muy destacado es su vertiente pedagógica, posible gracias a la estrecha colaboración con el Conservatori del Liceu y el mecenazgo de la Fundació de Música Ferrer-Salat. 2.148 personas, entre estudiantes de música y público curioso, asistieron a alguna de las 14 clases magistrales ofrecidas, con artistas del nivel de Uri Caine, Gonzalo Rubalcaba, Antonio Sánchez y María Schneider, entre otros.